Turismo
La diversificación como modelo de futuro
La industria turística se postula como uno de los ejes en el modelo económico de futuro de las comarcas de Castellón. El sector se ha afianzado en el primer tercio del siglo XXI con la puesta en marcha del aeropuerto y la ampliación del número de alojamientos tanto en la costa como en las zonas de montaña.
Supone el 13% del PIB de la provincia
Emplea al 9,60% de la población ocupada
La actividad turística inició su expansión en los años sesenta y setenta con el desarrollo de complejos residenciales y hoteleros junto a los balnearios de la Vilavella, Benassal o Catí a finales del siglo XIX y en las villas de Benicàssim a principios del XX. Una tradición turística que se ha mantenido constante hasta la actualidad.
Un sector que evoluciona
El carácter residencial y familiar del turismo se mantiene como hegemónico en las comarcas de Castellón aunque el sector ha evolucionado y se ha afianzado como referente en el turismo de conciertos, de experiencias y de aventura.
Tipo de alojamiento preferido
60% vivienda propia / alquilada / casa de amigos
25,6% estancia en hoteles
123.717 plazas de alojamiento
Repartidas entre hoteles, hostales, pensiones, campings, casas rurales, albergues y apartamentos.
Récord de visitantes en 2019
4,4 Millones / 481.000 extranjeros
Visitantes en 2023
3,8 Millones (+18,9% respecto a 2022)
468.929 extranjeros (+18,4% respecto a 2022)
Riqueza patrimonial y medioambiental
El destino de sol y playa se mantiene como el preferido por los turistas que apuestan por Castellón para pasar sus vacaciones, donde cuentan con 32 banderas azules otorgadas por la Fundación Europea de Educación Ambiental. Es, precisamente, en la costa donde se asienta el mayor número de alojamientos, aunque en el interior el número de plazas se ha incrementado en los últimos años y ya se acerca a los 15.500. El turismo rural, experiencial y de aventura se ha convertido en uno de los atractivos de la provincia gracias al potencial medioambiental y cultural que ofrece el territorio.
32 banderas azules
Otorgadas por la Fundación Europea de Educación Ambiental
Interés natural y patrimonial
Parques naturales
- Penyagolosa,
- La Serra d’Irta,
- La Serra d’Espadà,
- El Desert de Les Palmes
- Illes Columbretes
- Cabanes-Torreblanca
- La Tinença de Benifassà
Existen, además, diversos puntos de interés patrimonial como las pinturas rupestres de arte levantino de los abrigos del barranc de la Valltorta, declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y que tienen su punto de encuentro en el Museu d’Art Rupestre de Tírig (https://museudelavalltorta.gva.es/va/) o los conjuntos arquitectónicos de localidades como Morella, Culla, Vilafamés o Peñíscola o Segorbe.
Aeropuerto y festivales
La puesta en marcha de las instalaciones aeroportuarias ha supuesto un impulso a la llegada de turistas extranjeros a la provincia. En 2017 Castellón recibió más de 615.000 turistas foráneos y en 2018 más del 28% de los viajeros internacionales ya llegó a través del aeropuerto de Vilanova d’Alcolea. En el año 2023, el aeropuerto ha logrado los mejores resultados de su historia con 283.259 pasajeros y 9.780 movimientos de aeronaves. Una infraestructura que en los últimos años ha abierto rutas con Londres, Bucarest, Oporto, Budapest, Milán, Berlín, Bruselas y Madrid, entre otras.
La llegada de británicos, fieles a su cita anual con el Festival Internacional de Benicàssim (FIB), ha sido una de las razones de la rápida aceptación del aeródromo por parte de los turistas.
Este evento musical es una de las apuestas comerciales del verano y, en concreto, del llamado turismo de festivales, que comparte protagonismo con el Arenal Sound de Borriana, el Rototom o el Festival de Jazz de Peníscola, que con más de 600.000 asistentes entre los cuatro eventos, se han convertido en instrumentos dinamizadores del verano castellonense y creadores de marca.
La oferta musical es una apuesta del sector por la diversificación que atrae a un público más joven y amplía el perfil del visitante que llega al territorio. Esta se complementa con las propuestas de turismo deportivo (maratón de Castellón), de aventura (más de 79 empresas de turismo activo), cultural (más de 58 museos en la provincia, patrimonio arquitectónico), de salud, de cruceros o el turismo gastronómico (3 restaurantes estrella Michelin) para desestacionalizar un sector en el que más del 65% de visitantes viene en busca del sol y playa.